
Coba, descubre estas ruinas Mayas
Cobá, ubicado en la Península de Yucatán, son unas ruinas mayas que impactan a sus visitantes por su belleza, conservación y ubicación. Están situadas cerca de Tulum, a tan solo 20 minutos en coche o transporte público. A su alrededor, además, hay varios cenotes que puedes visitar. De hecho, alquilé una bicicleta y me adentré en tres de ellos antes de visitar las ruinas de Coba. Pero vayamos por pasos, conozcamos un poco más estas ruinas mayas, cómo llegar, y qué nos vamos a encontrar cuando lleguemos a Coba.
Coba, tesoro de la Riviera Maya
Aunque no al 100%, se cree que el nombre del lugar original fue Kinchil Cobá, en referencia al Dios Solar Maya y de una denominación puramente geográfica que se relacionaría con los vocablos mayas “Cob” (o “Kob”), que significa picada o turbia, y “Ha”, que significa agua, juntos formarían la denominación “lugar de agua turbia o picada”, posiblemente haciendo alusión a los lagos situados cerca de donde fue edificada esta ciudad.
Historia de Coba
Ubicada a mitad de camino entre Tulum y la gran Chichén Itzá, dicha zona está rodeada de cinco increíbles lagos, que fueron los que ayudaron a la subsistencia y desarrollo de esta ciudad maya. Las evidencias revelan que en el año 100 a.C. ya existía un asentamiento humano en este lugar, aunque no fue hasta el año 500 y 900 de nuestra era cuando Coba se erigió poderosa en toda la región, convirtiéndose así en una de las más grandes ciudades mayas de la época, con cerca de 55.000 habitantes en una extensión de 70 kilómetros cuadrados.
En pleno auge generó una red de relaciones comerciales a través de los denominados sacbés o caminos blancos con otras ciudades desarrolladas como fue Calakmul o Tikal en Guatemala, e incluso con los aztecas de Teotihuacan. Fue en el año 900 cuando Coba comenzó con una gran disputa con Chichén Itzá, acabando Coba derrotada. Fue así como perdió su importancia política en el territorio. No obstante, la ciudad se mantuvo en pie hasta el siglo XIV. Cuando los españoles llegaron a Coba, se la encontraron completamente despoblada.
Recorrido por las ruinas mayas
Llegué hasta aquí en transporte público desde Tulum. Justo enfrente de las letras coloridas «TULUM», ubicadas en una plaza céntrica de la ciudad, hay una parada de combis que se dirigen a este lugar. El costo es de 70 pesos mexicanos y salen cada media hora o cuando la combi esté casi llena.
La entrada a las ruinas tienen un costo de 80 pesos mexicanos, pero te da la opción de pagar con tarjeta por un costo extra. Desde que llegas a la entrada del parque arqueológico te das cuenta de la increíble belleza que alberga. Frondosos árboles flanquean el camino que te conduce a los diferentes lugares en los que se divide la ciudad maya de Coba.
Te van a intentar vender el tour con guía, puedes tomarlo, pero la verdad es que está todo bien señalizado y puedes recorrerlo por tu cuenta. Siempre me gustó revisar algún documental después de visitar lugares como este, y hablar también con los locales, para conocer un poco su historia. Ahora bien, desde que entras te vas a encontrar a la derecha el denominado «Grupo Coba». Ahí se sitúa el espacio de Juego de Pelota y el Templo de la Iglesia. Sus muros de piedra emanan una historia casi olvidada, que se ve reflejada en la naturaleza que ha ido recuperando lo que una vez le perteneció.
Continuamos el camino rumbo hacia la pirámide más alta del norte de la Península de Yucatán: la pirámide Nohoch Mul, de 42 metros de altura. Por el camino te puedes encontrar vestigios arqueológicos en forma de pequeñas estructuras o pirámides, e incluso otro juego de pelotas. Y de repente, ahí estaba, con un calor insoportable, pero divisando una maravilla. La pirámide se alza sobre un frondoso bosque. Me senté a ver cómo las personas subían y bajaban por la empinada pirámide, que ya se encuentra resbalosa por el continuo paso de la gente. Es por eso que ya está prohibido subir a la cima de la pirámide. Y créanme que es una pena, porque el espectáculo es asombroso.
Después de un rato observando, y reponiendo fuerzas, comencé a subir por la pirámide. El paisaje es sublime en su cima. Una frondosa vegetación inmensa se extiende hasta donde tus ojos alcanzan a ver. El cantar de los pájaros es, en este caso, la banda sonora perfecta. Y pese a lo duro de la subida, es una experiencia increíble.
De camino de vuelta puedes pasar por el grupo de las Pinturas si te desvías a la izquierda unos 500 metros. Además, hay un grupo de ruinas un poco más alejado, se conoce como Macanxoc. No me alcanzó el tiempo a ir ya que lo hice todo a pie.
Cenotes cerca de Coba
Ubicados a tan solo 6 kilómetros de las ruinas, se encuentran tres cenotes muy bonitos. Alquilé una bicicleta en la puerta de las ruinas, allí me dieron un mapa y me indicaron cómo llegar a los cenotes. Cenote Choo Ha, cenote Tankach Ha y cenote Multum Ha. Llegar hasta ellos fue duro, pues el calor sofocante junto con la humedad hacen que el camino sea más difícil. Sin embarco, lo recomiendo 100%. Bañarte en sus aguas frescas es maravilloso. Tiene un costo de 50 pesos mexicano para acceder a ellos. Cerca de Tulum también hay bastantes cenotes que puedes visitar si viajas por esta zona de la Riviera Maya. Aquí te dejo una recomendación de cinco cenotes cerca de Tulum.
Que ruta tan bella! Es viable hacerla en bicicleta? Hay posibilidad y variedad de alquiler de bicicletas en la zona turistica?
La verdad que la ruta fue increíble. Sí, hay varias empresas en la zona que alquilan bicicletas, y están en buen estado. Los vendedores son muy amables, y siempre se puede negociar el precio final. Te invito a que disfrutes de este maravilloso lugar